viernes, 26 de septiembre de 2014

GUERRAS VENEZOLANAS DEL SIGLO XXI (QUINTA): "LA GUERRA DEL HAMPA CONTRA EL CIUDADANO"



PRIMERA LECTURA

sábado, 28 de enero de 2012
ALIANZA TÁCITA ENTRE EL HAMPA POLITICA (CASTRO-CHAVISTA) Y EL HAMPA COMÚN

---(En Analítica, Miércoles10 de junio del 2009---

 A TEODORO PETKOFF: SOBRE HAMPA, SOCIALISMO Y MUERTE

Estimado amigo, reciba un cordial saludo de mi parte. Estoy muy de acuerdo con el tratamiento que le ha dado usted al tema de la inseguridad, tanto el la portada-editorial de su Diario “TalCual”, del 09-06-09, como en la nota de su Alter Ego “Simón Boccanegra”.

En un texto mío “El feo plan barrio armado” –- (del inefable Alcalde Juan Barreto) --escribí en el año 2008 lo siguiente:







..."En los violentos años 60, los gobiernos de turno instauraron la fea costumbre de mezclar a los jóvenes detenidos por alborotadores políticos en los mismos calabozos con el hampa cpmún. Un testimonio de un joven detenido en el famoso Retén de la Planta, contaba con pelos y señales la situación vivida. Apenas llegarón al pabellón-calabozo común, el "lider" de los malandros exortó a sus camaradas:

¡Estos son "ñángaras" revolucionarios: no se metan con ellos! E inmediatamente explicó las razones de dicha prohibición: Elos tienen compañeros armados en las calles, y el que toque a uno de los que están aquí, tendrá su castigo apenas salga de la prisión, incluso la mano oculta de los "ñángaras" puede alcanzarlo aquí mismo, aquí adentro ¡Santa palabra!.


La aviesa intención del represor gubernamental, de la época, era la esperanza de contaminar a los "ñangaras" con el hampa común, y así debilitar la intención revolucionaria, malearla, corromperla.

Y se dieron casos, raros, de hampones "regenerados" por el discurso de los "ñángaras", y puestos temporalmente al servicio de la "revolución", sobre todo en las nefastas "expropiaciones" bancarias, de larga tradición "leninista" en la Rusia prerevolucionaria:

¡EL FIN JUSTIFICA LOS MEDIOS!


También se dieron casos, raros, de jóvenes "revolucionarios", expertos en "expropiaciones", que ante la derrota de su movimiento, se transformaron en hampones comunes y corrientes; o se posternaron, por su depresión, ante la droga y otras costumbres viciosas, tal como pasarse al "enemigo", e incorporarse a la represión de sus antiguos camaradas. Todo esto muy doloroso, pero muy educativo.



Sin embargo, en los largos días de comunes calabozos, algunos jefes malandros, los más "ilustrados", se acercaban a los "ñángaras" y les decían: estamos en la misma lucha, ustedes están contra el sistema y nosotros también; ustedes están contra los ricos, y nosotros también; la diferencia está en que nosotros nos apropiamos individualmente de lo obtenido, y ustedes se lo entregan al Partido, para la "revolución"; al final somos "panas" con causas comunes:

¡TREMENDA LECCIÓN!




Y aquí llegamos a la actualidad, 1998-2008: Con el famoso y discutido problema de la inseguridad. Hemos dicho en otros escritos que hay una alianza tácita entre el hampa común y el gobierno chavista; mejor dicho:

¡ENTRE EL HAMPA COMÚN Y EL HAMPA POLÍTICA: AMBAS ESTÁN DE ACUERDO EN LAS EXPROPIACIONES!




Debemos recordar la famosa frase del "Único", apenas comenzaba su desgobierno:

...¡CÓMO NO VAN A ROBAR SI TIENEN HAMBRE!...



Lo cual se convirtió en un tácito permiso para la "expropiaciones" de los "pobres" contra los "ricos"; avalado por aquello de "SER RICO ES MALO", por tanto ser pobre es bueno; aunque esto no vale para los familiares, y amigos, del "proceso".



El discurso violento y populista de líder y sus seguidores, alienta la acción detructiva del hamponato político y del hamponato común, son aliados tácitos, amén de la impunidad manifiesta ante la corrupción gubernamental, y ante la acción hamponil. El Poder Judicial, el Poder Moral, el Poder Contralor, el Poder Fiscal, el Poder Ejecutivo. miran hacia otro lado ante los desafueros de unos y de otros; la consigna predominante es:

¡TODO ES DE TODOS, NADA ES DE NADIE! Por supuesto de ello están excluídos los familiares y amigos del régimen.



La maldición gitana proudhonista-anarquista ¡LA PROPIEDAD ES UN ROBO! (Francia, 1840)



 Parece alentar todos los actos de la "revolución bonita" y de la "revolución hamponil", dos caras de la misma moneda. A ello hay que añadir la amistad y alianza con gobiernos que protegen y auspician el terrorismo internacional; amén de la declarada amistad y alianza con grupos narco-terroristas como las FARC y el ELN colombianos, y otros parecidos del Hemisferio Occidental, y del resto del planeta.



Esta idea primitiva y atrasada proviene de la creencia en una antigua "EDAD DE ORO", en la cual no existía propiedad privada, y todos éramos felices: la comunidad primitiva; ésta se desintegró por el afán de riqueza y poder de algunos jefes de tribus y de sus guerreros,



y aparecen en orden sucesivo el esclavismo, el feudalismo, y el capitalismo; signados por la explotación del hombre por el hombre; por las luchas de clases: "motores" de la Historia; y por la violencia como "partera" de la Historia; siguiendo a Marx y Engels, en el "Manifiesto Comunista" (1848), la solución final será la expropiación de los expropiadores, y la construcción de un socialismo mediante la dictadura revolucionaria de la clase obrera, aquí se dará a cada quien según su trabajo.



El prceso anterior será coronado más tarde con la sociedad comunista: desaparición del Estado, y la repartición de bienes según las necesidades de cada quien, el desarrollo humano máximo:




¡LA NUEVA EDAD DE ORO!

Ya sabemos por la Historia Mundial entre 1917 y la actualidad qué ha sido de estos macroexperimentos sociales: el socialfascismo de Italia, l nacionalsocialismo de Alemania, España, Portugal, y Europa Oriental; el comunismo ruso, chino, coreano, vietnamita, y cubano:

¡UNAS RUINAS ECONÓMICAS Y HUMANAS!...Y esa es la "receta" que nos quieren aplicar en Venezuela, 1998-2008, los "Iluminados de Sabaneta"

SEGUNDA LECTURA

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miércoles, 9 de abril de 2014


ALEXANDER CAMBERO: EL HAMPA Y SU GATILLO REVOLUCIONARIO--EUD, CARACAS, 09--04--14--



El hampa y su gatillo revolucionario...


ALEXANDER CAMBERO| EL UNIVERSAL

miércoles 9 de abril de 2014 12:00 AM

Estamos en el reino de la impunidad. El hampón vive a sus anchas mientras los honestos están acorralados por la violencia. Es difícil derrotar esta espiral asfixiante, desde las altas esferas se protege a estos delincuentes porque sostienen que ellos son guardianes de la revolución. Son increíbles los casos que son obviados por los jueces complacientes en desmedro de una sociedad estupefacta. Una cruel realidad que ha convertido a Venezuela en la nación más violenta del hemisferio occidental. Las cifras preliminares de los primeros meses del año arrojan datos tan espeluznantes que tendríamos como horizonte al propio matadero. Degollina que nos deja con hondas heridas en una colectividad volátil, que jamás guarda momentos de tranquilidad ya que a cada segundo aparece el sobresalto, se construye futuro sobre la base de una realidad enmarañada. Caldo de cultivo para escribir episodios decadentes de una nación que sufre retortijones en su intestino social. Aprendemos del mal ejemplo y por lógica no podemos sacar nada bueno de ello.

Existe un cordón umbilical entre la inseguridad y la violencia. Son como el maridaje perfecto de un coctel a base de arsénico. Nuestro país toma del mezclado con resultados funestos para una patria huérfana de un eficiente sistema judicial. Sin la adecuada preparación y autonomía necesaria para ejercer con pulcritud la administración de justicia. Responden exclusivamente a los arrebatos del proceso y no a las bondades del derecho como esqueleto en donde se sostiene el músculo de una nación. Cuando es la ideología la que juzga se cometen desafueros que terminan pervirtiendo las decisiones. El descoque gubernamental deja que la balanza se incline de manera evidente hacia algún ángulo del problema.

En este mundo de trapisondas color de mi sangre existen aquellos cubiertos bajo el manto de la impunidad. El gatillo revolucionario no tiene frontera que lo limite. Puede accionar el arma y hasta asesinar a quemarropa al que se le antoje. Sabe que su gobierno logrará librarlo de cualquier investigación, por eso no tiene escrúpulos ya que sus venas están cargadas del odio profundo que una ideología malévola anidó en su corazón. Quizás desarraigar este sentimiento sea la más dura prueba para restañar la profunda herida de la patria, el recelo con lo cual se percibe al adversario es apenas una primera etapa de profundas ideas retorcidas que alimentan la maldad. Dejar que la impunidad tenga el control es algo que jamás dará un resultado acorde con la civilidad. Por eso les cuesta reencontrar el camino que conduce a la paz. Para desmontar las intenciones de aniquilar, primero debemos desarmar al corazón arrebatado. Esta debe ser la tarea de todo aquel que crea en la unidad real de los venezolanos...

alexandercambero@hotmail.com

@alecambero


TERCERA LECTURA

sábado, 13 de agosto de 2011

¡A MERCED DEL HAMPA!--(EUD, 13--08--11)--



Con este régimen no hay posibilidad de que disminuya el delito. Todo lo contrario

MIGUEL SANMARTÍN | EL UNIVERSAL
sábado 13 de agosto de 2011 12:00 AM

Hace tiempo, cuando asomaba furtivamente por las rendijas del cotidiano trajinar esta bufonada (perversa y dañina receta cubano-comunista) que mientan "proceso" o tildan de Socialismo del Siglo XXI, un amigo-colega, agudo observador y lapidario en su decir, vaticinó convencido: A este gobierno no lo van a tumbar los militares, lo destronará el hampa. Hoy los hechos certifican que, en efecto, todo está bajo control... ¡¡¡del hampa!!!

Varios años después de aquella profecía; de 160 mil venezolanos inmolados por una delincuencia desmoñada; de millares de atracos, robos, hurtos y arrebatones; de ríos de lágrimas derramadas por familiares plagiados, lesionados o asesinados; de montones de bienes despojados a punta de pistola; de incontables protestas (como la reciente de los transportistas); de horas y días infinitos de rabia-sufrimiento ante tanto daño causado por la acción delictiva (consentida) y de la acumulación de impotencia debido a la impunidad con la que actúa el malandraje desaforado (enemigo del pueblo y aliado del régimen forajido), la cesantía del despotismo entronizado pareciera escrita: No se producirá por la vía violenta (como viperinamente está insinuan sus jerarcas) sino a través del voto democrático en diciembre (¿?) del año próximo.

Para la población (de todos los estratos y tendencias) la inseguridad es el problema más agobiante. Comparten esa angustia la inflación, el desabastecimiento, el desempleo, el deterioro de los servicios públicos (luz, agua, vialidad, transporte, hospitales, escuelas, etc.), la anarquía callejera, la falta de viviendas, los damnificados y las expropiaciones (así como el discurso agraviante y amenazador). Todos estos males son causados por una ralea regente resentida, indolente, ineficiente, corrupta, sectaria y siniestra.

La seguridad de los ciudadanos y el resguardo de sus bines nunca fueron prioridades para este régimen. Lo demuestra el déficit de funcionarios (los que hay están mal pagados y peor dotados). Tampoco le conmueven los 40 mil hijos de vecina "privados de libertad" (como cínicamente los denominan) ni las abominables cárceles donde languidecen hacinados, como despojos humanos, muchos de ellos sin siquiera estar imputados.

Con este régimen no hay posibilidad alguna que disminuya el delito. Todo lo contrario. El malandraje es parte activa de la revolución. Utilizado para amedrentar adversarios y/o disuadir cualquier forma de inconformidad o protesta. Por ello el paro de transportistas (muchos afectos al caudillo) fue levantado sin lograr el objetivo: protección para ellos y sus unidades. Seguirán arriesgando su pellejo para ganarse el pan de sus hijos mientras el peligro de muerte rueda con ellos.

msanmartin@eluniversal.com


CUARTA LECTURA

domingo, 9 de agosto de 2009

LINA RON SEGÚN MANUEL  CABALLERO

--EUD--09-08-09-


Manuel Caballero // ¿"Anárquica" o princesa del hampa?

--(El Universal, Caracas, Venezuela, 09-08-09)--




Decir que "un grupo anárquico" asaltó Globovisión es un disparate semántico
Decir que "un grupo anárquico" asaltó las instalaciones Globovisión es, en el mejor de los casos, un disparate semántico; y en el caso de los voceros del gobierno, una mentira pura y simple. La anarquía como hecho y como doctrina es el rechazo de toda autoridad. Quien lo expresó con mayor claridad fue Pierre-Joseph Proudhon, quien llegó a decir que "quienquiera que ponga su mano sobre mí para gobernarme es un usurpador y un tirano y lo declaro mi enemigo". De acuerdo con esa idea, la jefa del grupo asaltante no tiene nada de anárquica, pues jura y perjura en el nombre del más aborrecible de todos los poderes, el poder personal; y peor aún si encarnado en lo que los anarquistas de todo pelo y condición más detestan y combaten: el militar. A un grado tal que durante la guerra de España, los milicianos anarquistas se vigilaban para no marchar jamás al paso.

Protegida y estimulada Desde que se hizo conocer, esta dama ha sido no sólo una vociferante partidaria de ese poder, sino que éste la ha cubierto, protegido y estimulado, como lo evidencia su más somero apunte biográfico.



La primera vez que se oyó hablar de ella, fue a raíz del asesinato de miles de personas inocentes en el atentado contra las Torres Gemelas de New York. Con un grupo de sus secuaces, a modo de celebración del crimen, quemó entre gritos de alegría, fanfarrias y canciones una bandera norteamericana. O sea que estaba exaltando una triste hazaña del odio de otro de los poderes combatidos toda la vida por los anarquistas: el de la clerigalla, esta vez musulmana. Porque su celebrado Osama Bin Laden no atacaba el Estado sino al pueblo norteamericano, el "Gran Satán", con la aspiración confesa de establecer en todo el mundo un régimen teocrático, sustituir el Estado laico y democrático por un absoluto y despótico Comendador de los Creyentes.



Su carrera criminal A partir de allí comenzó su carrera delincuencial. Las páginas rojas suelen hablar del "hampa común" para diferenciar sus acciones de aquellos que cometen delitos pretextando que lo hacen para mayor gloria de la Revolución. Mientras que aquellos cometen atracos, éstos hacen otro tanto pero prefieren llamarlos "expropiaciones" como en la clandestinidad pre-octubrista acostumbraba llevar a cabo el camarada Stalin. Pero en el caso de la señora Ron, desde el principio era prácticamente imposible diferenciar sus acciones de las del hampa común, a partir de algo tan simple e inmediato como su lenguaje procaz, el habitual de los tratantes de blancas.



Todo el mundo presenció horrorizado como esa señora desarrollaba sus acciones con un frenesí y un estentóreo lenguaje que hacían sospechar que su apellido no fuese tal sino el combustible de un exaltado delirium tremens. Todo el mundo condenaba esas acciones y se asombraba con ingenuidad de que semejante peligroso parásito social gozase de una aparente impunidad.



El altar de la Revolución Hasta que se supo que esa impunidad no era ni aparente ni producto de la desidia policial. En una de sus delirantes habladurías de "¡Aló Presidente!", este último señor condenó no a las acciones criminales de la susodicha, sino a los que, desde diferentes ámbitos, "satanizaban" a quien era, dijo, sólo una meritoria "luchadora social". De tal modo y manera, que por obra y gracia del Supremo, Lina Ron era consagrada Gran Dama de la Revolución, elevada a los altares del proletariado junto con Louise Michel y Flora Tristán, Rosa Luxemburgo y Clara Zetkin, la Pasionaria y Zoia Konmodemianskaia.



Con semejante aval, esta señora ha continuado su meteórica carrera en el hampa: desde el asalto al Palacio Arzobispal hasta las agresiones a los medios independientes, no gubernamentales. Cuando se le va la mano, sobre todo cuando actúa en uno de esos momentos en que el Héroe del Museo Militar decide endosar la piel de cordero y la doña, para decirlo en el lenguaje de la farándula, le "roba el show", se le hace algún leve reproche, se le pincha sin maldad un glúteo.

Chávez se niega a investigar el asalto al Palacio Arzobispal de Caracas

El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, criticó de forma velada a los grupos identificados con su régimen que asaltaron el Palacio Arzobispal de Caracas. En una entrevista en la cadena estatal, Chávez dijo que no ordenará una investigación sobre los hechos y negó su posible vinculación con el régimen diciendo que podrían estar infiltradas por la CIA.

La adoptó Diosdado A partir de cierto momento, Diosdado Cabello la tomó bajo su directa protección, y por eso se le veía menos en Caracas mientras gozaba de su sinecura en la Gobernación de Miranda.




 Pero el electorado de aquel Estado decidió no soportar más a aquel señor que aparte de sus bellos ojos exaltados por su Comandante en Jefe, no mostró (ni tampoco hizo ningún esfuerzo por adquirir) mérito alguno que le ganara la reelección.



 Y aquí sí se montó, como se dice, la gata en la batea: sacando la más simple de las cuentas, un contralor de la región demostró que el fulano podría tener los ojos más bellos del mundo, pero también la mano veloz del carterista: el enriquecimiento ilícito le ha ganado un puesto a la diestra del Dios Padre de la revolución bonita, en un Olimpo que de ladrones ya está atestado en un volumen desconocido en la historia de Venezuela (y mire que los ha habido, antes y después del Benemérito General Juan Vicente Gómez). Como los medios comenzaron a denunciar la insaciable ladronería del señor Cabello, aquí ha vuelto a entrar en liza esta princesa del hampa "bolivarera".



El mandón de Miraflores designó a Diosdado Cabello para acabar con la libertad de expresión sabiendo que pondría en eso todo su empeño, por ser quien más tiene que perder si los mass media se emperran en denunciar sus malhechurías. Y como la burocracia es siempre lenta, allí está presente para proceder a las "expropiaciones" de rigor este raro espécimen de una "anárquica" protegida y mantenida por el poder. El pobre Mijail Bakunín debe estar revolviéndose en su tumba.

hemece@cantv.net

 


QUINTA LECTURA

BALANCE DE LAS ACTIVIDADES DELICTIVAS

Así evolucionó el malandro venezolano

 

--(08 de junio 2014--Foto original del artículo)--

Fabiana Delgado/ Oscar Andrade


Una tasa de homicidios que ronda las 79 muertes por cada 100 mil habitantes, según cifras aportadas por el Observatorio Venezolano de la Violencia, instancia de alto calibre intelectual, habla de un país desangrado.

Basado en la aterradora estadística, en Venezuela asesinarían una persona cada 21 minutos, lo que perfila profundas patologías sociales que aplastan cualquier mínimo nivel de convivencia y bienestar.

La inseguridad se ha erigido por años como el primer mal de la nación y resalta siempre en la cúspide de encuestas como traducción de niveles de estrés y paranoia en una colectividad presa en sus hogares, el último y endeble reducto de supervivencia.

Con más de 12 millones de armas ilegales rodando por el territorio nacional la violencia se presenta como terreno fértil para el hampa y las mafias organizadas.

Pero no siempre fue así. El delincuente de los años 60, 70 y 80 era otro, tenía incluso códigos de respeto por la vida, protocolos básicos de resguardo vecinal y no gozaban al ver la sangre correr. Detallados estudios sociológicos adelantados durante años por el padre Alejandro Moreno, instalado en las barriadas más peligrosas de Caracas y otras importantes ciudades, describieron el perfil de ese malandro.

Y entonces se configuraron los factores apocalípticos para engendrar la nueva máquina asesina. Fractura de los núcleos familiares, pobreza, abandono, hambre, impunidad, y la importación de nuevas formas del crimen como el sicariato.

El sistema penitenciario, desmoronado en fracaso, sirvió sencillamente para potenciar el ansia por la sangre.
Se empezó a disparar sin miramientos. El asesinato ya no era una última salida del malandro en situación de amenaza, sino más bien una hazaña, la carta aval para conseguir el respeto y escalar a los altos sitiales del crimen. Mientras más tiros mejor. Dejó de importar la mujer, el niño, el abuelo y la vida se banalizó.

Los reportes de asesinatos en Venezuela suelen ser dramáticos. Las cifras apuntan a que cada 30 minutos hay un homicidio en el territorio nacional según informaciones extraoficiales del propio Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas. El respeto a la vida luce extraviado por completo.

Pero, ¿Cómo se llegó a tener una delincuencia tan violenta en el país? Una de las razones propias del fenómeno las ha esbozado el padre Alejandro Moreno, sociólogo especializado en el tema de la criminalidad en su investigación “La violencia asesina en Venezuela”, publicada en la revista científica “Espacio Abierto”, donde plasmó las formas de vida de malandros confesos de varias generaciones que sirvieron de fuentes vivas para la documentación del desgarrador ensayo.

Según Moreno, la formación de los individuos delincuentes conlleva a muchas aristas, pero ha destacado primeramente la fractura del hogar, y luego la ostentación y el respeto que inculcan la calle a los jóvenes que toman “la vía” como le llaman a la práctica hamponil.

Pero la crisis no ha parado allí. Según el investigador, ahora el asesinato se ha convertido en una hazaña para los malandros, algo que en los años 60, 70, 80 e incluso, mediados de los 90, era una suerte de “accidentalidad”.

“En los barrios suelen hablar del ‘malandro viejo’ como distinto al ‘malandro nuevo’, esto corresponde, según nuestras historia de vida, a la experiencia de las comunidades populares en su bregar con los malandros”, apunta.

La investigación arrojó diferencias sustanciales que explican la evolución del malandro venezolano y su paso a convertirse en una máquina asesina.

En la “forma antigua” “malandro viejo”, explica Moreno, el asesinato no es presentado como una hazaña ni una acción valiosa y propia de quien es valiente o frío o despiadado.

“Lo cuentan como un hecho que fue necesario producido por las circunstancias, como algo inevitable si el ejecutor quería salvarse de lo peor. El énfasis hazañoso no está en el asesinato mismo, sino en la manera de ejecutarlo, esto es, en la habilidad con que se hace, en la inteligencia con la que se planifica, en la astucia con la que se es capaz de descubrir los puntos débiles del otro…”

Ahora bien, en la “forma media”, malandro que puede oscilar entre treinta o cuarenta años, ciertamente tampoco el asesinato no es un acto glorioso, pero tampoco se oculta. “Se confiesa sin ningún pudor la voluntad de hacerlo y se narra con indiferencia, sin lamentarlo ni sentirse culpable. Es una actitud de ligereza”, señala Alejandro Moreno.

Pero en la “forma nueva” de delincuente, donde encajan perfectamente jóvenes varones menores de edad hasta entrados los 20 años, el homicidio sí es una “gloria”.

“El énfasis está en la capacidad de asesinar y asesinar mucho. El número de asesinatos con relación al tiempo es muy importante. Cuanto más muertos se tenga encima y más joven sea el sujeto, más digno de admiración y más valioso es. La violencia asesina en este grupo es descarada, totalmente fría, inmotivada o con motivaciones absolutamente banales, casi mecánica”, subraya la investigación.

Otras mecánicas. En la “forma antigua”, se delimitaban los campos de acción, de modo que si el hampón robaba, no asesinaba o hería. En la “forma nueva”, no hay separación, pueden robar, atracar y asesinar en una misma acción.

Los “malandros viejos” como los ha calificado Moreno, más que por su edad, por su forma de operar, mantenían estrechos lazos con sus comunidades, las protegían de otros malandros externos, e incluso eran protegidos por los mismos vecinos si cumplían ciertas normativas. El hampón sentía la necesidad de ser aceptado por sus vínculos de la niñez con familias que lo vieron crecer.

Pero los “malandros nuevos” no tienen ningún apego. “No le importa si es aceptado o no. La aceptación está sustituida por su capacidad brutal de imponerse, de ejercer poder total sobre la comunidad. Es el poder como instinto de muerte en su estado más puro”, advierte el texto.

Moreno destaca que el delincuente nuevo es un “solitario” y su esquema mental no está abierto en ninguna medida al diálogo. Huye de la policía o la enfrenta.

Ahora el delito tiende a ser más violento. Según la investigación realizada por los miembros del Doctorado de Ciencia Humanas de LUZ llamada “Racionalidad del Comportamiento de Jóvenes de Vida Violenta”, los cambios que puedan existir en el comportamiento de muchachos violentos tiene que ver con lo que es la actual sociedad venezolana.

“Los niveles de expectativas de los jóvenes en los sectores populares hoy día se modificaron totalmente en relación con las décadas de los 60 o 70, las expectativas eran otras, fundamentalmente a través de la operación de medios de comunicación como la televisión, los estilos de éxito de la juventud tienen que ver con portar cosas de marcas”, detalló el profesor Alexis Romero, investigador y coordinador del Doctorado de Ciencias Humanas de LUZ.

Y prosiguió: “Los últimos años se han impuesto inéditas formas de violencia que no conocía la sociedad venezolana, vinculados ahora con el tema del tráfico y microtráfico de droga y esas formas tienen que ver con sicariatos, cobro de vacunas, secuestros, que ahora conocemos y eso no existía antes de forma masiva como es visto ahora”.

El investigador refiere que antes no teníamos sicariatos, no existía en tal magnitud como ahora. “Era una sociedad relativamente tranquila, ahora tenemos una violencia sin bandera, una violencia que no ve ni política ni religión, una violencia sin sentido, de la vida cotidiana, violencia social”, destacó Romero.

Con respecto al malandro de antes que se cuidaba de las apariencias en su comunidad afirmó que eso se acabó. “No es que no tenga reglas, tiene unas normas, el malandro viejo tenía un cierto código en el cual incluía no cometer acciones en el sector donde se vive. No actuaba en contra de una determina población”.

“Nos encontramos en una situación de una tasa de homicidio muy elevada, el asunto es una cosa nueva, es la acción de este nuevo malandraje, el delito tiende a ser siempre muy violento. En los tiempos anteriores los conflictos entre los jóvenes se resolvía por medio de lesiones, golpes; ahora termina en general en muerte”, reveló el profesor jubilado de LUZ sobre lo que reza el estudio que llevan a cabo en la línea de investigación sobre violencia.

Otras modalidades del delito. Las modalidades de robo existían con menos dimensión, según Romero, experto en el tema. “El robo a mano armada no se veía tanto en años anteriores, más frecuente era el hurto: despojar a la víctima de su bien cuando ésta no estaba presente”, dijo.

El coordinador del Doctorado de Ciencias Humanas de LUZ aseguró que “El delito ahora tiende a tener consecuencias fatales”. Ya que esto reúne cientos de factores tanto sociales, familiares, educativos y hasta de religión.

Muerte cada 21 minutos. El Observatorio Venezolano de Violencia publicó el informe correspondiente a 2013, según el cual ese año cerró con una cifra de 24 mil 763 muertes violentas en Venezuela.

De acuerdo con esos números, se registró, en 2013, una tasa de 79 muertes por cada 100 mil habitantes.
Si se toman como referencia las cifras aportadas por el OVV, cada día perdieron la vida 68 habitantes de Venezuela, de manera violenta.

Si se promedia en minutos, una persona perdió la vida cada 21 minutos y nueve segundos. A pesar de estos números, el ministro de Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Miguel Rodríguez Torres, aseguró que en Venezuela la tasa de homicidios era de 39 por cada 100 mil habitantes, en 2013, según lo publicado en medios de comunicación nacionales.

Todas estas cifras corresponden a las más recientes publicadas por el OVV. En relación con las que maneja el gobierno nacional, no existen otros números de fecha reciente.

El que mata. Hoy día el que mata es joven. Su entorno familiar y falta de educación influyen a que crezca viciado y lleno de violencia.

El libro “Y salimos a matar gente”, escrito por el mismo Alejandro Moreno y publicado en el año 2007 por la Universidad del Zulia define el perfil y códigos que manejan los asesinos venezolanos, esto como resultado de una serie de entrevistas y ardua investigación.

Moreno define que el nivel socioeconómico no influye en nada. Delinquen porque quieren sobresalir, quieren adquirir poder y respeto.

Moreno se refiere al malandro de hoy. “La violencia se ha agudizado desde el punto de vista cuantitativo, pero más que todo desde lo cualitativo, por la forma de cometer el delito”. También se refiera a que “Los motivos fútiles antes no eran muy recurrentes, pero ahora es lo que hacen todos. Es raro que maten de un disparo; matan de varios”.

Según Roberto Briceño León, del Observatorio Venezolano de Violencia, “el delincuente venezolano se perfila desde el odio y el resentimiento. Así crecen los que matan persiguiendo un objetivo, o los que lo hacen sin razón aparente. Matan porque quieren y porque creen que pueden”, dice el sociólogo.

Tipos de armas utilizadas:

Navaja. A principio de los años 70 u 80 las navajas eran las más utilizadas para cometer arrebatones y atracos.
Era más difícil conseguir un arma de fuego. Y lo más común era el hurto, por lo que el delincuente no recurría a tener de primera mano un arma de fuego.

Revólver. El revólver calibre 38 es el arma de fuego preferida por la delincuencia para todo tipo de delito, desde robos, asaltos express, hasta asesinatos.

A pesar de eso ya no es muy común en la actualidad que se cometa un delito con este tipo de arma, pues el hampa tiende a usar pistolas y otro tipo de armamento más sofisticado.

Según expertos, quienes la poseen son principiantes o hampones sin mayor experiencia. Está arma es de uso más fácil. Y en el mercado negro sus precios son más accesibles.

Pistola 9MM. Según expertos consultados, el uso de pistolas 9 mm es más común desde finales de los 90.
“Los delincuentes más hábiles y con más posibilidades las poseen”, reveló una fuente detectivesca del Cicpc.

Y es que el hampa hoy día prefiere una pistola que un revólver, ya que la pistola tiene capacidad para más municiones, su alimentadora puede tener hasta 22 balas, mientras que el tambor de un revólver, abarca de cuatro a ocho balas generalmente.

Cargadores regulares, cargadores extralargos “peine cocosette” son los más utilizados entre la delincuencia.

AK47. Es un arma de combate usada por las bandas organizadas del país. “Desde principios del 2000 proliferó el uso de este rifle de asalto, destacó un experto en balística que sirvió de fuente en estos datos.

El fusil AK-47 es popular en el mundo entero por su alta precisión, poder de fuego y capacidad de alcance que llega hasta un kilómetro. Fue muy usado en la guerra de Vietnam y actualmente
es una de las armas favoritas en las bandas organizadas. En la extinta cárcel Nacional de Maracaibo los pranes y sus lugartenientes las lucían sin pudor alguno. Ha sido usada en numerosas emboscadas en la ciudad de Maracaibo.

La Fractura
Los malandros, en todas sus generaciones pasan por una misma trayectoria de separación familiar. Según Moreno estas son algunas etapas con configuran la mentalidad del asesino de hoy:
R Desde niños tienen relación débil con madres o padres
R No se perciben como pertenecientes de lleno en su familia
R Comienzan a mostrar conductas desadaptadas
R Los expulsan del colegio
R El vecindario comienza a percibirlos como problemáticos

R Se desligan de la familia desde temprano
R Comienzan desde muy jóvenes a dormir en la calle
R El alejamiento de familia se hace prolongado
R Empiezan a integrar grupos de delincuentes
R Ya comienzan a formar parte de la vida delincuencial

La falta de divisas abre otro escenario al malandraje. La escasez de divisas y su otorgamiento al sector de las autopartes planteó un nuevo escenario de adaptabilidad para el malandraje.

Ahora, una nueva casta de hampones más calculadores que asesinos, ha surgido en Maracaibo. Diseñan estrategias de inteligencia y espionaje para no tener que enfrentarse a plomo con autoridades o someter con violencia a sus víctimas. Y sus operaciones conllevan a grandes botines diarios sin disparar una bala.

La banda “Los Norteños” es la que está en la cima de estas organizaciones al momento. Al menos 300 hombres ejecutan acciones hamponiles en los principales centros comerciales de Maracaibo, cadenas de farmacias y hasta urbanizaciones.

Hurtan baterías, airbags, computadoras, y dispositivos de alta demanda y que escasean por demás. Según la Cámara Nacional del Comercio de Autopartes, el sector se encuentra diezmado ante la falta de liquidez de divisas para surtir inventarios en tiendas y lleva tres años de retraso en pago a sus proveedores internacionales, precisó recientemente José Cinnirella, presidente del bloque.

La falta de existencia de repuestos básicos abrió de lleno un mercado negro donde se negocian a diario las piezas más buscadas para cualquier vehículo, y ahí entró, al menos en Maracaibo, el ejército de “Los Norteños”.
Fuentes internas del Cicpc, quienes le siguen el rastro, refirieron que esta banda la lideran “El Cochino”, en Ciudad Lossada y, hasta hace poco, “El Mocho” en Ziruma, abatido en un controvertido hecho cerca de las populares Tostadas El Reloj, en la avenida La Limpia de Maracaibo.

Tienen un triángulo de acción desde ambos sectores y Altos de Jalisco, para operar en centros comerciales como Sambil, el Ipsfa, cerca del Cuartel Libertador, Farmatodo, en Bella Vista con calle 72, y establecimientos aledaños.
Hasta el conjunto residencial Isla Dorada se vio afectado el domingo 25 de mayo. 57 vehículos perdieron sus baterías tras un ataque relámpago que dejó la sorpresa para la mañana siguiente.

Modus Operandi. Las fuentes policiales detallan que los hampones actúan en complicidad con vigilantes, a quienes pagan entre mil y mil 500 bolívares, para que se “hagan de la vista gorda”. Si los celadores no cooperan, son amenazados de muerte, añadió el vocero. Al lugar llegan tres hombres, uno es el “suichero”, otro el ayudante y otro se encarga de “marcar”, dentro del local comercial, a la persona cuyo auto hurtarán.

El trío detiene el vehículo en que se desplazan, detrás del auto que atacarán. El “suichero” y el ayudante abren ese auto y se llevan baterías, airbag, reproductores, mientras que el otro sujeto está monitorea al dueño dentro del comercio para evitar ser descubiertos. Los delincuentes hurtan las autopartes de vehículos Aveo, Mitsubishi, Tucson, Fortaleza, Kia Sportage, Fiesta y Corolla.

Dijo la fuente policial que estos sujetos tienen una alianza macabra con algunos representantes de seguros, para surtir el “mercado negro” con las piezas hurtadas.

Señaló que “El Cochino” se desplaza en una Trailblazer, color azul, “El Gordo” (Ziruma), en un Corolla, color blanco, y “El Negro Chacha” (Ciudad Lossada), en una Tucson, color azul, estos que se nombran son unos pocos de los más de 300 hombres que reúne el lucrado negocio ilícito.

Caída de “El Mocho”. El pasado martes 3 en la noche, luego de un seguimiento, el Cicpc iba a detener a Jhons Darryns Aguilar (32), en la avenida 40, vía a Amparo, a pocos metros de tostadas El Reloj, de La Limpia.
Hubo un careo y el hombre se resistió a la autoridad. Entonces devino el disparo.
“El Mocho de Ziruma”, resultó herido. Al ingresar al Hospital General del Sur, falleció.
Lo señalaron de dirigir a “Los Norteños” desde Ziruma.

Muchos han dejado el “bachaqueo” para ligarse al robo y hurto de piezas de autos originales

►Antes de iniciarse en el hurto de partes automotoras, la megabanda, compuesta por 400 integrantes, se dedicaba al contrabando de combustible y de alimentos.
►Dados los reiterados operativos donde se caían los planes de la agrupación delictiva, planificaron el hurto de autopartes, sin confrontar a las víctimas.
►Esta actividad les ha deparado considerables ganancias. Según voceros policiales, cuentan con la complicidad de algunos agentes de seguros, quienes los ayudan a colocar las piezas en el “mercado negro”.
►Esta banda ha mantenido su accionar en centros comerciales y establecimientos como: Farmatodo de calle 72. Farmatodo de El Paraíso. Farmatodo de Bella Vista, cerca de la avenida Universidad. Centro Comercial Sambil. El Ipsfa, cerca del Cuartel Libertador.
También en varios locales comerciales a lo largo de la avenida Bella Vista, así como en La Lago.
►También han actuado en la avenida Fuerzas Armadas, sobre todo cerca del centro comercial Doral Center Mall.
►Utilizan herramientas pequeñas con mucha agilidad. No les toman más de cinco minutos sustraer las piezas.
►El Eje de Investigaciones de Robo y Hurto de Vehículos ha mantenido constante revisión en sectores donde se sospecha puedan encontrarse los miembros de la banda, para desarticularla.

“Los Norteños”. Esta agrupación delictiva se ha dedicado al hurto de piezas y partes automotoras. Las ofrecen en el “mercado negro”, ante la marcada ausencia de repuestos y partes automotoras en los establecimientos del ramo. La policía científica investiga si representantes de aseguradoras se han prestado para la irregularidad”.




Transcripción, Edición, Imágenes: Lic. en Historia Víctor Manuel Gruber de Figarelli, UCV Caracas 1976.

UN EXCELENTE COMENTARIO EN FACEBOOK, HOY, 27--09--14--

  • A Maria Teresa Herrera Caicedo y a ti les gusta esto.

  • Mil gracias, mi querido Profesor! Como siempre, retrata de manera magistral la "banalidad del mal" que nos implantaron de manera sistematica y reiterada. Hannah Arendt la concluyo, muy pocos lo leyeron, incluso de ese grupo reducido, muy pocos lo entendieron. En la Alemania nazi, se banalizo el mal que se aplico a un grupo etnico, se creyeron las tesis esgrimidas y se volvio costumbre... el mundo guardo silencio. En la Venezuela chavista, se ha balalizado el delito, se le dio un marco de impunidad con justificacion sin precedente y ahora se premia con becas el hecho ilicito de portar un arma, cuya experticia tal vez la.vincularia a algun asesinato... y se nos volvio costumbre... Un fuerte abrazo!!! Dios me.lo.cuide!!!
  • Víctor Gruber Excelente comentario mi querida Dra. Lo incorporaré a la publicación, hoy mismo: ¡Mejor imposible!






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