Caracas, 17 – 04 - 02
DE CHUAO A MIRAFLORES
La manifestación del 11 de abril fue convocada por diversas organizaciones de la sociedad civil. Debía arrancar en el Parque del Este y culminar en Chuao. Todo en apoyo a la gente de PDVSA que libraba una lucha frontal por la meritocracia, y la defensa de su lugar de trabajo. La concentración de Chuao, agrupó a decenas de miles de venezolanos, y más tarde a centenares de miles, era pacífica, democrática, civil, y oposicionista. Esa masa humana fue progresivamente estimulada, por las intervenciones de distintos oradores, y cuando la “temperatura” subió hasta un grado suficientemente alto, surgió la consigna: ¡A Miraflores! El torrente humano, fue creciendo en la medida que se acercaba a su objetivo, y de repente las adyacencias al Palacio de Gobierno se convirtieron en un matadero, al parecer hay muertos de lado y lado. Esas muertes deben ser esclarecidas, los responsables enjuiciados, los círculos terroristas desarmados, disueltos; por el bienestar psicológico, moral y espiritual de la nación ¿Se necesitaba sangre venezolana para justificar el “pronunciamiento”; o para “mostrar” la capacidad defensiva de los mal llamados “bolivarianos”; o ambas cosas a la vez? Vamos mal, la barbarie nos abruma, rectificar es de sabios.
Víctor Gruber
C.I.V.- 1.730.472
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