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jueves, 15 de mayo de 2014

RAFAEL MUCI--MENDOZA--ASUNTO: "UROCULTIVO DE OÍDO DERECHO"--EUD, CARACAS, VENEZUELA, 14--05--14--



 

Asunto:  Urocultivo de oído derecho...


¨Urocultivo de oído derecho…¨

Rafael Muci-Mendoza

 

Si no fuera por lo trágico, este récipe de un médico integral comunitario, llamaría a una sonora carcajada. Pudiera ser una excepción, pero me temo que no lo es… Es una muestra del resultado de una oferta engañosa a humildes jóvenes venezolanos que hemos denunciado en repetidas oportunidades; la medicina es cosa seria y a pesar de la ayuda de 8.000 millones de dólares anuales (5.800 millones de euros) que nuestro país le aporta a Cuba, miren ustedes la clase de formación de algunos de esos médicos; la Misión Médica Cubana la ha convertido en un bodrio. El comunismo cubano no entiende ni le conviene entender que la figura del médico –hasta que llegaron a sus manos, respetable-, no puede ser un insumo para ser vendido y explotado por la revolución para hacer ver al pueblo que la preocupación por los pobres domina sus sueños. Una pobre medicina para pobres, no puede ser el desiderátum de ningún gobierno.

Pasmosa cifra: 17 mil médicos comunitarios graduados y 2.500 en proceso de ¨de-formación¨, un grupo de ellos sin criterios de selección están realizando posgrados clínicos. ¿Dónde están los profesores?, ¿Dónde están las aulas, los laboratorios y las pruebas de selección y seguimiento?, ¿Son estos profesores los mismos cubanos que no aprobaron la evaluación de sus pares? Directivos del Colegio Metropolitano de Médicos apoyan este engendro, pero no permitirían que pusieran sus manos sobre sus cuerpos, los de sus hijos o nietos: ¡El miedo es libre! La Facultad de Medicina de la UCV y algunos de sus directivos tienen mucho que ver con el forjamiento de baremos para permitir estos posgrados y el daño a la medicina nacional.

Este récipe es quizá la punta de un íceberg de un proceso macabro, lleno de engaños y mentiras que oculta la mala praxis del día a día en aquellos que no pueden reclamar y al cual muchos médicos hemos dado la espalda porque no es nuestra incumbencia: "laisser taire, laisser passer" (dejar hacer, dejar pasar). La medicina deja de cumplir sus fines altruistas cuando se le usa con fines políticos o comerciales. Aterra la pregunta de qué hacer con estos jóvenes cuando de la negra noche renazca un nuevo día, y su claror permita ver cuánto daño se ha hecho…

 

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